Guerra de Guerrillas fue una carta que, en nuestro grupo, tuvo cierta popularidad durante un tiempo. Es una chispa que, por dos manás, hace 2 de daño a una criatura o a un jugador. Hasta ahí muy normal, pero tiene una habilidad que la hace muy interesante: si una criatura o un efecto controlado por el oponente te obliga a descartarla de tu mano, le haces 4 de daño a la criatura que elijas o al oponente.
Evidentemente, lo más lógico era meterla en la Reserva y sacarla cuando jugabas contra mazos quitacartas. Sin embargo, y como ahora veremos, no pocos jugadores la metimos durante un tiempo de base.